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Siglo
XII
- XIII
Planta:
nave única, con tres tramos divididos por contrafuertes,
ábside
semicircular de menor altura, precedido por un
presbiterio
recto. Su gran esbeltez quizá motivara problemas de
estabilidad que dieron lugar a la construcción de los
contrafuertes
de sus fachadas norte y sur.
Cabecera
divida horizontalmente por
impostas,
y verticalmente con
semicolumnas
sobre las que discurre una cornisa que se apoya en
canecillos
decorados; en el centro de cada paño se abren huecos
estrechos enmarcados por arcos de medio punto.
Tres portadas,
de las que destaca la
meridional,
formada por cinco arquivoltas con decoración vegetal,
salvo la figura de un obispo y dos cabezas, una
diabólica y otra masculina. La arquivolta inferior es de
perfil polilobulado. Se cierra la portada con un remate
compuesto por cabezas humanas enlazadas. Los capiteles
se decoran con aves, plantas y monstruos. Sobre la
puerta existe un rosetón abocinado, con cuatro lóbulos
en forma de cruz.
La portada
oeste está
formada por un arco de medio punto y tiene sobre ella un
rosetón con ocho lóbulos radiados. Se sitúa junto a la
torre rematada por una espadaña, de la que se conserva
el cuerpo inferior.
La portada
norte,
parcialmente oculta, es también de medio punto, con
arquivoltas y un ventanal estrecho sobre ella.
La proporción vertical de su interior resulta casi
gótica. La nave se cubre con techumbre de madera, el
presbiterio con bóveda de cañón apuntada y el ábside con
una bóveda de cuarto de esfera nervada. Los
muros laterales
son de un grosor notable, el que da al lado sur tiene un
pozo en su interior.
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Aparece en un
documento de
1157,
prolongándose sus obras hasta el siglo XIII, hacia
1215
no habían concluido las obras.
Se piensa que
Giral Fruchel
dirige una buena parte del proyecto.
Perteneció a la
Orden de San
Juan y ante su
portada se administraba justicia durante algún tiempo.
En el muro norte
aparece adosado un
sepulcro
del siglo XII, presenta forma de lecho
mortuorio cubierto con un dosel que descansa en tres
columnas exentas en la parte frontal y dos adosadas al
muro. Se puede ver la escultura de una dama con dos ángeles turiferarios,
por encima dos ángeles conducen el alma en su ascensión
a los cielos.
Se piensa en una influencia oriental y que su autor
pudo ser un seguidor del
maestro Mateo.
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