Prendas de algodón

Caso práctico:

Phineas

Ramón Matoses comenzó su andadura en el viejo Madrid, en la calle de Cuchilleros. Allí instaló su primer establecimiento y trabajó con un equipo de tan sólo cuatro personas: el diseñador, un comercial, la costurera y él mismo. Empezaron a distribuir camisetas y se dieron cuenta de que su proyecto se iba complicando más de la cuenta. Los clientes pagaban mal y tarde, mientras que el local piloto marchaba muy bien, así que comenzaron a conceder franquicias. Vino una, y luego otra, hasta que consolidaron su cadena de tiendas, además de las suyas propias, por Madrid y en las principales ciudades de España.

Los momentos del arranque fueron duros, pero ahora que ya se encuentran en todo el territorio nacional con un total de sesenta puntos de venta, cuentan con una gran fidelidad de marca. De éstas, cuarenta y cinco son franquicias y quince son propias.

¿Tenía usted vocación empresarial o tradición familiar?

Realmente no había tradición. Tras acabar la carrera de Derecho, hacer un master en el London School of Bussines y trabajar en varias empresas, decidí montar la mía propia. Tenía inquietudes, quería hacer cosas, ser mi propio jefe. Al irme de trabajo pude pedir el paro de golpe y montar mi primera tienda, que es una manera de hacerlo cuando no tienes capital suficiente.

¿Cómo fueron los inicios?

Estábamos cuatro personas en una trastienda muy pequeña del viejo Madrid, donde abríamos hasta las once de la noche. Allí trabajábamos la costurera con su máquina, el diseñador, la persona que se encargaba del área comercial y yo. Hasta que el equipo creció a cuarenta empleados: veinte en las fábricas, quince en las tiendas y cinco en oficinas. Y los dos diseñadores son españoles. Actualmente, las camisetas. son serigrafiadas, con un diseño muy cuidado y una calidad extraordinaria. Se renuevan continuamente y se confiere exclusividad al diseño haciendo tiradas cortas.

¿Qué consejos le daría usted al joven que empieza?

Que lo que hay que hacer es intentarlo. Yo abrí la tienda, la pinté... y tuve ambición. También que tengan en cuenta que hay que tener una estructura siempre mínima, no crearla cuando todavía no la necesitas, que es el error que comete mucha gente. No se puede crear una estructura superior a las necesidades, sino que siempre las necesidades tendrán que suplicar no pedir más estructura. Muchas veces se va todo el capital por ese cauce, cuando lo que se necesitaba era vender. Eso es lo que hicimos nosotros. También es verdad que hay que dar con el producto, que no les tan fácil; y, por supuesto, trabajar mucho.

¿A qué otras cosas cree que se debe el alto índice de mortalidad de los nuevos negocios?

A veces el error no está ni siquiera en la gestión, sino en que el producto no era el adecuado, o que el mercado estaba saturado y no había por dónde meterse.

¿Qué planes de futuro tiene Phineas?

En su momento optamos por consolidamos en España, pero aquí tan sólo nos queda un crecimiento relativo y pausado. Ahora es cuando salimos al extranjero. Nos introduciremos en Francia y Portugal como primeros mercados en Europa. La gente nos conoce, el producto gusta y lo importante es que el público permanezca.

¿Cuáles son las ventajas de ser el propietario de un negocio?

Es tu dinero, tomas tus decisiones y no se las explicas a nadie, aunque como gestión puede que sea incorrecto no contar con un consejo que te respalde. Pero al no estar supeditado a nadie te cuidas mucho.

¿Es muy dura la competencia en este sector?

Sí, el textil es un sector maduro, pero nosotros nos hemos convertido en líderes del mercado. Siempre que tengas un producto innovador y grandes dosis de imaginación, y, por supuesto, trabajes, te puedes hacer con un pequeño hueco dentro de la difícil competencia.

¿Qué tipo de gente busca en su equipo'?

Gente motivada e ilusionada con el proyecto, con buena dinámica, Para mí no es tan importante la formación, porque aprender, ya irán aprendiendo.

¿Han seguido alguna estrategia de marketing y publicidad?

Hemos apostado por la calidad del producto, y la publicidad se hace sola porque es algo que se lleva puesto encima. Lo que hacemos principalmente es ';merchandising';, además de tener un departamento de prensa activo, realizar promociones, etcétera. Además, seguimos una estrategia basada en la calidad del diseño, habiendo logrado un claro reconocimiento por parte de una clientela heterogénea. Gracias a eso y a un gran capital humano, hemos conseguido hacer de Phineas una empresa con un claro prestigio dentro del sector textil y con una identidad propia que el público reconoce.