Un cambio físico es cualquier cambio que experimente un cuerpo sin que cambien las partículas que lo forman. Asociamos el agua al estado líquido pero no dejará de ser agua si está en estado sólido (hielo) o en estado gaseoso (vapor de agua).
Los cambios físicos se originan por dos causas: una, por una fuerza externa sobre un cuerpo y otra, por el calor.
El calor es una forma de energía que se transmite de un cuerpo más
caliente a uno más frío o viceversa. Gracias al calor podremos
originar un cambio físico de la materia.
Si a un cuerpo sólido le aplicamos calor, las partículas que lo
forman comienzan a separarse y a moverse con mayor facilidad pasando a estado
líquido.
Si aplicamos más calor al agua en estado líquido, las partículas
empezarán a moverse libremente y estar más separadas unas de otras.
Al enfriar el estado gaseoso, las partículas volverán a juntarse
recuperando su anterior estado, pasando de gas a líquido.
Un mayor enfriamiento del estado líquido, produciría la solidificación.