ESPERANZA ORTEGA EN EL IES LUCÍA DE MEDRANO
Esperanza Ortega pasó su infancia entre libros. Se asomaba a la puerta del despacho de su padre y esperaba a que él concluyera la página del libro que tenía entre manos y levantara la vista. Era éste un ambiente de plenitud, un espacio de paraíso que la autora supo magnificamente comunicar a los alumnos del IES Lucía de Medrano de Salamanca. Y ese placer le ha venido acompañando toda la vida: como traductora del Canto V del Infierno de la Divina Comedia, donde Francesca y Paolo, adúlteros, penan su culpa de haberse enamorado leyendo historias de amor, abrazados al libro del pecado por toda la eternidad.
El amor siempre ha presidido las lecturas y la escritura de esta poeta. Cuando niña, en su colegio de Palencia, leía clandestinamente los Veinte poemas de amor de Neruda. Una monja interceptó el libro prohibido que corría de mano en mano entre las alumnas, pero también cayó presa de los versos del chileno.
Esas hermosas historias, y algunas más, trufaron el encuentro con los alumnos de este instituto salmantino. la génesis de algunos de sus poemas, lo que la invita a persistir en el tenaz empeño de apresar un solo segundo de poesía, siempre escurridizo, difícil, fue hilo conductor de la charla que encantó, literalmente, al auditorio.
犀力士