No hay actividad creativa más seria, más comprometida, que jugar con las palabras y las emociones que éstas nos despiertan. El poeta salmantino Raúl Vacas se encontró ayer con los alumnos de 2º de la ESO del IES Andrés Laguna de Segovia. Fue una fiesta para los sentidos, como era de esperar. Desde el primer momento los alumnos crearon un ambiente de atención a ese rumor de la poesía que tiene que ver mucho con escuchar con los oídos, sí, pero sobre todo con el corazón. Y parece que la poesía como juego nos da respuestas a nuestro corazón ajetreado y a veces incomprendido. Raúl propuso la poesía como terapia para explicarnos las tres heridas de Miguel Hernández: la del amor, la de la muerte y la de la vida.

¿A que no sabéis que las palabras esconden números como agua-0 o que en el mar se posa la mariposa? ¿Qué pasaría si una carta de un concejal de hacienda se entreteje con una carta de amor? Los alumnos del Andrés Laguna ayer disfrutaron con sus respuestas posibles, muchas. Pero lo que es más importante entreabrieron sus puertas a entender otras maneras de expresarse y comunicarse, con emoción y sinceridad.

Esperamos con ilusión su participación en forma de pequeñas reseñas, poemas, escritos...

Ah, y si tienes algún complejo (que se rían de tu apellido, por ejemplo) no hay como anticiparse con creatividad. Raúl Vacas se presenta diciendo: Muuuuuuuy buenos días, seguro que nos lo vamos a pasar muuuuuuuy bien. Y el humor liga muy bien con la poesía.