Todo Plan de Lectura debe intentar consolidar todo aquello que funciona bien y mejorar aquellos elementos que pueden potenciarse.
Como se ha mostrado en el apartado primero, la situación de partida de la lectura en Castila y León está caracterizada por el hecho de que el alumnado de nuestra Comunidad destaca por su nivel de comprensión lectora, a la vez que puede mejorarse su hábito de lectura.
Por ello, todo Plan de lectura para una nueva etapa debe intentar consolidar todo aquello que funciona bien y mejorar aquellos elementos que pueden potenciarse. En esa doble función se integran las estrategias y acciones institucionales que se detallan.
En su conjunto, pretende consolidar la red de asesoramiento a los centros educativos, potenciar la formación del profesorado sobre lectura como responsabilidad transversal, facilitar los mejores materiales de apoyo para su tarea en diferentes soportes, dotar del máximo reconocimiento social a aquellos centros que destacan por su implicación con la lectura, potenciar el uso de las bibliotecas en todas las áreas y mostrar la necesidad de que los centros mejoren el diseño y desarrollo de sus Planes de lectura de centro.
Todas estas actuaciones pretenden ser el marco de apoyo para que los centros diseñen y lleven a cabo “Planes de lectura de centro” que vengan a dar una respuesta organizativa que consolide el alto nivel de comprensión lectora de nuestro alumnado, incorporando estrategias de lectura para los nuevos soportes, y que potencien el hábito lector y la autonomía para la lectura de los alumnos de nuestra comunidad autónoma.